Recuerdo que, la primera vez que vine al Pico de Peñalara, subí directo y, luego, bordeé por la vertiente segoviana porque no me atreví a pasar hacia el Risco de los Claveles por la cresta. ¡Qué yuyu me dió! Terminé el recorrido por las lagunas pero me quedó una espinita clavada.
La segunda vez, vine con mis compañeros de club Irene, Ricardo y Santi, también subimos directos, pero tampoco hice la cresta completa, ya que pasé por la vertiente madrileña para luego trepar hacia el indicador del risco. ¡Y ya son dos espinitas en Peñalara!
Hoy, a la tercera va la vencida. No subo directo sino que, en sentido contrario a las agujas del reloj, hago primero las lagunas para girar luego por el Puerto del Nevero y, hasta aquí, todo bien. Diría que la nieve casi en su punto, un poco blanda, así que me pongo los crampones, agarro el piolet, y a por ella.
¡Por supuesto, que no piense nadie que es como la cresta del Sabre! ¡No!, tan solo es una espinita que me quedó grabada, la primera vez que pasé por aquí, en septiembre de 2.008.
Aparcamiento de Cotos a las 8 de la mañana, se nota que es miércoles.
Aunque no lo parezca es mitad de abril en la Sierra de Madrid
Llegando al circo de Peñalara
Laguna Grande de Peñalara
Lagunas de los Pájaros.
Ahora sin llegar al Puerto del Nevero, se gira a la izquierda para recorrer toda la arista
y pasar el Risco de los Claveles, el más alto.
En mitad de la cresta, Peñalara al fondo.
Vista atrás al Risco de los Claveles.
¡Por fin hago completa la cresta de Peñalara y en solitario!
Pasada la cresta, la ruta se vuelve senderista
Vértice de Peñalara sobre la vertiente madrileña
Vertiente segoviana
Y, con esta, ya son tres veces que estoy en Peñalara
Vista atrás, Hermana Mayor y Peñalara
De regreso, el aparcamiento a las 12 de la mañana.
Indicador geográfico en el mirador de La Gitana