sábado, 15 de octubre de 2016

Ibon de Estancauilha, Val de Toran


Obligándome a vencer la pereza por el cansancio acumulado de tantos kilómetros, hechos y por hacer, marcho a la Val de Toran sin tener claro que ruta hacer. Está muy lejos pero, aunque solo sea respirar el aire puro del Valle de Aran, ver estos maravillosos paisajes me dan fuerza, vitalidad y serenidad. La predicción del tiempo es excelente mientras que para el resto del Pirineo dan nieblas matutinas o algún que otro chaparrón. Ni por asomo se me ocurre pensar que será un día diferente.

Datos IBPIndex
Modalidad
HKG
Distancia total
10.744 Km
Tiempo total
4:36:48 h
Velocidad media total
2.33 Km/h
Quien ha hecho la ruta
Yo solo
Desnivel acumulado
835 m
Tiempo en movimiento
4:05:41 h
Velocidad media en movimiento
2.62 Km/h
IBP
95
Ratio de subida
15.8 %
Tiempo parado
0:31:07 h
Velocidad máxima
5.48 Km/h

Datos de Wikiloc

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Majestuoso bosque de pino negro

Saliendo hacia los altos prados

Siguiendo el arroyo cambio al margen derecho

Charca antes de la cabaña

Cabaña d'Arbaet

Flanqueo a la izquierda después del corral de la cabaña

¡Un poco más de esfuerzo!

Ibon de Estancauilha, paradigma de la Val de Toran. ¡Mágico! 

Parte superior del ibon que alcanzo por mi izquierda.
Al final me decido e intento la cima.

Tiron d'Estancauilha.
La pendiente herbosa me impresiona mas de lo que debiera
y a escasos metros de la cima abandono.

Dispuesto a tomar el bocadillo en el collado no doy crédito a lo que veo.
¿Un jabalí? ¡No, osos!

Bajan veloces huyendo de algo y van hacia el bosque.
¡No salgo de mi asombro!

Gracias al visor de la cámara puedo localizarlos

¡La osa controla que la cría va detrás!

Andan por la pared con suma facilidad.
¡Qué bichos!

Está claro que hoy es mi día de suerte

Buen porte, parece que se relaja la osa.
Ver osos en la soledad del monte es momento iniciático.

Según he leido, hay unos 32 ejemplares de osos en el Valle de Aran

¡Naturaleza, fuerza y majestuosidad!

Tras un rato en el collado he de retornar pero antes, necesito templarme.
¡Estoy agitado!


¡Ojo a los resbalones que si te quedas en el monte ya sé quién te come!

Ahora sí, como el bocadillo con el Cap del Tiron detrás.
¡Vaya día!, menos mal que llevo la navaja de osos,   ;-)) 

¡Espero no encontrarlos otra vez de regreso!

Entro de nuevo en el bosque y me recuerda la travesía Pass'Aran

Ahora siento el bosque un poco mas cerca, mas mío.
¡Sigilo, soledad y suerte!. 



Cuando emprendas tu viaje a Itaca
pide que el camino sea largo,
lleno de aventuras, lleno de experiencias.
No temas a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al colérico Poseidón,
seres tales jamás hallarás en tu camino,
si tu pensar es elevado, si selecta
es la emoción que toca tu espíritu y tu cuerpo.
Ni a los lestrigones ni a los cíclopes
ni al salvaje Poseidón encontrarás,
si no los llevas dentro de tu alma,
si no los yergue tu alma ante ti.

Pide que el camino sea largo.
Que muchas sean las mañanas de verano
en que llegues -¡con qué placer y alegría!-
a puertos nunca vistos antes.
Detente en los emporios de Fenicia
y hazte con hermosas mercancías,
nácar y coral, ámbar y ébano
y toda suerte de perfumes sensuales,
cuantos más abundantes perfumes sensuales puedas.
Ve a muchas ciudades egipcias
a aprender, a aprender de sus sabios.

Ten siempre a Itaca en tu mente.
Llegar allí es tu destino.
Mas no apresures nunca el viaje.
Mejor que dure muchos años
y atracar, viejo ya, en la isla,
enriquecido de cuanto ganaste en el camino
sin aguantar a que Itaca te enriquezca.

Itaca te brindó tan hermoso viaje.
Sin ella no habrías emprendido el camino.
Pero no tiene ya nada que darte.

Aunque la halles pobre, Itaca no te ha engañado.
Así, sabio como te has vuelto, con tanta experiencia,
entenderás ya qué significan las Itacas.